Y después de beberse la noche
a sorbos de luna…
la sirena jugaba desnuda
nadando en el mar
Y esperaba la barca del alma
llegando a la orilla…
para darle un puñado de vida
y su dulce mirar
La sirena vestida de plata
trenzaba su pelo…
y del cielo una estrella dorada
la quiso adornar
Y de lejos se escuchan los buques
llegando a su puerto…
con gaviotas que anuncian sus sueños
cantando en el mar!
Eileen